Cómo decorar Galletas con Glasa Paso a Paso

Pues ya estamos en el último tutorial de la Trilogía: Cómo aplicar la glasa en las galletas de forma correcta.

Como os indicaba en el tutorial que aprendíamos a hacer la glasa os ampliaría la información de la importancia de los adaptadores.

Los adaptadores son esenciales, ya que permiten darle varios usos a una misma manga pastelera.

Todas con adaptador

Os muestro un ejemplo:

1.- Llenamos una manga pastelera de glasa real de color rosa (bueno venga, del color que queráis. ¡Es que sois de un exigente!).

2.- Le ponemos la boquilla del número 2 para delinear la galleta.

3.- Con el biberón de glasa fluida rellenamos la galleta.

4.- Cogemos nuestra manga con glasa rosa le quitamos la boquilla del número 2 y le adaptamos la del número 1 para hacer un borde punteado con mini puntitos.

5.- Le quitamos la boquilla del número 2 y le añadimos la del número 21 para hacer mini flores de decoración que le añadiremos una perlita de azúcar en el medio.

Habéis visto como con la misma manga y para la misma galleta hemos empleado 4 boquillas. Si no pusiéramos adaptador necesitaríamos 4 mangas con glasa rosa y el consiguiente aumento de cantidad de glasa elaborada. Ya que si repartes la glasa de 1 huevo en 4 partes, la manga pastelera no te queda lo suficientemente llena para poder trabajar bien.

Siempre adaptador. Always adaptador. 

Los hay de todos los tamaños. Lo ideal es que para cada tamaño de boquilla que tengamos, tengamos varios adaptadores para ella.

Sobre las boquillas, las ideales para delinear son las del número dos, o como máximo del número 3.

Las medidas son estándar para todas las marcas, pero sí que es cierto que las marcas Europeas son más generosas que las Americanas. Me explico. Las boquillas de la marca Wilton (Americana) son más pequeñas de diámetro que las Städter (Alemana). Si coges una boquilla del número 1 de la marca Wilton es como si cogieras una 0 o doble 0 de la marca Alemana.

Las medidas que aquí os indico son de Wilton porque es la marca que tenéis la mayoría.

Después para hacer detalles en las galletas necesitáis la boquilla del número 1, la de estrella número 21 que podéis hacer flores pequeñas y la de pétalo pequeño nº 102 que sirve para hacer ondas y volantes.

 Los famosos biberones sirven para poner la glasa fluida y estampar o rellenar. Los biberones normales, los que utilizamos para dosificar salsas o el aceite es el que utilizamos para rellenar ya que tiene la boquilla más ancha.

El biberón con boquilla, es muy práctico por que le podemos adaptar cualquier boquilla que nos interese, pero en la mayoría de casos utilizaremos la que trae por defecto que es una nº1.

¿Qué es estampar?, buena pregunta. Hay muchas técnicas para decorar galletas como os expliqué en el primer tutorial, pero con glasa las más usuales son dos:

1.- wet on wet (mojado sobre mojado)

2.- Mojado sobre seco (qué original, ¡eh!)

Bien, pues estampar es wet on wet. Con la glasa fluida acabada de aplicar hacer dibujos encima con el biberón que incorpora boquilla, es decir, el biberón de estampar, je, je. Lo que se consigue estampando es que el dibujo quede integrado en la glasa.

Es una técnica muy fácil con resultados sorprendentes y muy profesionales. Un ejemplo es el efecto marmolado. Pero también para hacer puntos, filigranas, flores y una lista infinita.

Antes de empezar a delinear nuestras galletas, lo que debemos hacer es preparar nuestras mangas con glasa real y los biberones con glasa fluida.

Es decir, de cada color debe haber una manga para delinear y un biberón para rellenar que podemos luego convertir en estampar si nos interesa.

¡Comencemos pues!

Nos debemos poner en una mesa o mármol según estemos más cómodos sentados o de pie. Pero lo más importante es que estemos cómodos. Colocar las galletas y coger la primera que vamos a delinear. Pensad por donde vais a empezar y ponérosla como os sea más cómoda, no es necesario que esté recta sino como os vaya mejor. De ello dependerá el resultado final.

Ahora cogemos la manga pastelera y encima de un papel o la propia superficie de trabajo apretamos bien la glasa haciendo fuerza hacia la boquilla y hacemos salir un hilo de glasa para eliminar el aire que pudiera quedar y que luego nos podría cortar la línea de delineado y en el mejor de los casos tendríamos que borrar y volver a empezar.

Hecho esto empezamos a delinear. Para ello debemos poner la boquilla a 45 grados de la galleta y desde altura, unos 2 o 3 centímetros empezar a soltar la línea. Esto hará que el delineado quede perfecto y no se aprecien temblores que sí suceden si delineamos a ras de galleta. Es cierto que luego la glasa fluida lo tapará, pero cuanto más perfecta esté la base, más perfecta quedará la superficie.

Si nos queda mal la línea, podemos borrar. Sí, sí, ¡y sin goma!. Esperáis un minuto a que la línea se seque un poco y con un palillo a ras de galleta retiráis la glasa. Voilà!, galleta como nueva para empezar a delinear de nuevo.

Que conste en acta que yo NUNCA me equivoco, lo he hecho para enseñaros a borrar....je, je...

Si queréis decorar en dos colores, debéis delinear un parte de un color y la otra de otro, para que los colores no se mezclen al rellenar la galleta.

Una vez tenemos el delineado, ya podemos empezar a rellenar o inundar las galletas como también se le conoce a este paso.

Debemos coger el biberón con la glasa fluida y empezar a tirarla delineando de nuevo la galleta. Es decir cubriendo la línea fina delineada para ocultarla y así haciendo círculos alrededor de la galleta hasta que quede perfectamente cubierta por la glasa.

Si os queda algún hueco sin cubrir os podéis ayudar de un palillo para extender la glasa. Pero debe ser un paso rápido, ya que la glasa se seca muy rápido, y si ya ha empezado el secado se os quedará la marca.

Técnica Wet on Wet: Este paso también debe ser rápido, antes de que empiece el secado de la glasa.

Una vez la galleta ya está rellena/inundada de glasa fluida cogemos el biberón de estampar con la boquilla del número 1 y hacemos unas líneas horizontales dejando 0,5 a 1 centímetro entre ellas y con un palillo de la primera línea empujamos para la segunda, de la segunda para la primera, y así hasta llegar al final. También se puede hacer de la primera línea empujar hasta la última y de la última a la primera, y así sucesivamente. Este es el efecto Marmolado.

También podemos estampar una flor. Con el biberón de boquilla hacemos un punto en el medio y cinco o seis, o los que queráis alrededor se consigue una flor integrada en la glasa.

Y mil y una más combinaciones que se pueden hacer, ¡sólo debéis dejar volar vuestra imaginación!

Antes de que se seque la galleta es el momento de incorporarle perlitas o cualquier decoración pequeñita que queráis que quede integrada, de este modo se pegará perfectamente a la galleta.

Técnica Mojado sobre seco: Consta en hacer las decoraciones con glasa una vez ya se ha secado la galleta. Se recomienda 24 horas de secado.

Así podemos hacerle unos volantes a un vestido, un collar a una princesa, unos ojos saltones a un gatito, y mil y una combinaciones.

Para hacer el volante cogemos la boquilla de pétalo número 102 y con la parte más ancha hacia arriba empezamos a hacer zig-zag, zig-zag hasta el final ¡y mirad que volante tan mono!. Siempre entrenad primero en un papel de horno o la superficie de trabajo, que cuanto menos borremos mejor para el resultado final de nuestra galleta.

Podéis decorar añadiendo detalles con papel de azúcar. El papel de azúcar es muy versátil y nos abre un abanico de posibilidades. Las troqueladoras nos hacen imaginar formas y escenarios para nuestras galletas. Mirad el corazón de papel de azúcar taladrado con troqueladora que toque le da a la galleta. Ya se ve mejor acabada, más trabajada. Y con esfuerzo cero.

Mirad la galleta de conejo, toda de glasa blanca y únicamente añadiéndole una colita con la boquilla de estrella número 21 queda mucho mejor, más personal. Muy minimalista. Pensad que menos es más. Lo recargado esta demodé.

Tips - Truquillos Extra:

Truco 1: Es recomendable no poner adornos muy duros en las galletas ya que no son agradables al masticar y le hacen perder calidad. Ahora hay un montón de perlitas y decoraciones en el mercado que son de corazón de cereal con lo que su textura se integra perfectamente con la de la galleta. Además son muy fáciles de masticar y seguro que nadie pierde un diente por el camino.

Truco 2: Para que el volante quede bien mejor utilizar glasa a punto duro.

Truco 3: El papel de azúcar y cualquier cosa que queráis añadir a la galleta se engancha con un puntito de glasa real.

Truco 4: Siempre que podáis las mejor que las boquillas sean de aluminio ya que definen mejor las formas.

Bueno, ahora las valientes como María y Eva Mª G. que me han comentado e incluso mandado fotos de sus súper galletas, ya pueden hacer la obra entera.

Por cierto, estoy enlazando este post a la fiesta número 52 de Personalización de Blogs

Un saludo.